domingo, 18 de mayo de 2014




SIN SEGUIDORES...NO HAY LIDERES.
Por Luis Hermann Elizalde

 
    Cuando hablamos de liderazgo, nuestra mente evoca la figura de una persona que debe reunir una serie de atributos como Motivador; Creativo; Integro; Energizante; que Inspire; Organizado; Comprometido; Buscador del bien común; Responsable; Original; Auténtico; Carismático; Emprendedor ;Excelente comunicador; con vocación de servicio; Solidario; Buen Oyente; Tolerante; Laborioso; Analítico; Justo; Flexible; Estudioso; Respetuoso de los demás; Objetivo;  y así podríamos continuar la lista con los mejores atributos  que una persona puede llegar a tener. En resumidas cuentas...un Superman.

 

   Sin duda que para ser Líder se requiere cumplir con una serie de cualidades que impulsen a los demás  a trabajar por una causa. Es por ello que en las organizaciones  de cualquier ámbito (Negocios; Deportes; Orquesta; etc.) el líder carga la responsabilidad del éxito o fracaso del resultado. Pero... ¿Y dónde queda la responsabilidad de los demás integrantes del grupo?

 

    Es fácil culpar a alguien más por el fracaso de un proyecto.  Son pocas las ocasiones en las que nos sentamos a reflexionar cuál fue nuestra contribución. ¿hasta donde fuimos nosotros también responsables del fracaso y no solamente el líder?

   Cada integrante del equipo tiene responsabilidad y no puede simplemente tomar un papel pasivo y después apuntar con un dedo incriminador para señalar al culpable. Se requiere de honestidad e integridad para evaluar de forma objetiva nuestra participación.  Preguntarnos si realmente hicimos nuestro mejor esfuerzo y si fuimos lo suficiente persistentes para ayudar al líder a lograr la meta última por la que se trabajó.

 

   Todos podemos  elevar la calidad de nuestro desempeño. El papel que jugamos dentro del equipo es de vital importancia.  Es por esto que si realmente queremos crecer como personas y dentro de la organización; tenemos que tomarnos en serio nuestro compromiso por contribuir al logro de los objetivos ayudando al líder en esta tarea; además...Sin seguidores; no hay lideres.